sábado, 29 de diciembre de 2007

BUENOS PROPOSITOS




Ayer precisamente, comentaba con mis amigos, que esta época del año es muy dada a hacer una pequeña reflexión de lo que han dado de sí los 365 días, bueno, malo y regular, y que el personal, tras el balance, hace firmes propósitos de cambios para el siguiente.
Nunca me había dado por hacerlo. Bueno, quizás sí el primer año de separada, que pasé sola el día de Nochevieja, con mi niña dormida en su camita desde las nueve, sí pensé ó supe que el año siguiente iba a ser mejor, pero porque caía por su propio peso, no como un propósito. Simplemente disfrutaba de las fiestas, de la familia, los amigos y deseaba que el siguiente fuera mejor, pero como un tópico.
Este año, sin embargo, me ha dado por hacerlo (hace medio segundo, que ya se sabe que no soy yo de reflexiones profundas, y de algo tenía que hablar en el dichoso blog).
El caso es que el balance no puede ser más positivo. Sí, sí, es lógico porque lo mejor del año lo tengo desde hace sólo 98 días y claro, está muy fresca la sensación de felicidad. Pero no es sólo esto.
Ha sido un año en el que me he sentido de lo más tranquila y feliz en general conmigo misma. Parece que he llegado a un equilibrio que me permite disfrutar de cada día, de cada momento que paso, bien con una amiga, bien de juerga, de compras... en fin, que a cada cosa consigo sacarle mucho más jugo que antes. Este aprendizaje ha durado muchos años y no terminará nunca, pero sí tengo claro que no cambiaría lo que tengo por nada del mundo: una hija maravillosa que desde hace casi un año me quiere (parece que la adolescencia se va alejando); unos amigos que, a estas alturas de mi vida son eso, amigos; una familia pequeña pero bien avenida y por último, pero no por eso menos importante, este amor que ha entrado en mi vida con una fuerza que no hubiera sido capaz de imaginar ni en mis más románticos sueños. Simplemente perfecto para mí.
Y entonces ¿qué puedo desear para el 2.008?. ¿Qué más se puede pedir?. Pues carroza como soy, sólo podría pensar en lo de “Virgencita, virgencita, que me quede como estoy”. Pero no, seguro que habrá muchas cosas mejorables. A ver... dejar de fumar un año de éstos, procurar acostarme antes y descansar más... Bah, tonterías.


Voy a hacer el firme propósito de cuidar más de mi gente, de hacerles ver cuanto les quiero y demostrarles lo importantes que son para mí.
(Dios, pero que melodramática me he puesto. Hala, a Cascante; se acabó).

¡ Ah, y Feliz 2.008 a tod@s!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bonito.

Tienes un alma enorme.

Te deso que el 2007 haya sido el peor de los años que te quedan por delante.
Y que yo lo pueda ver (aunque sea con los ojos en la mano).
Hacefalta.

suchata dijo...

Los ojos en su sitio, haga Vd. el favor!!!
Y favor que Vd. me hace...
Gracias y un beso enoooorme.

Anónimo dijo...

Marilurdes, marilurdes
turututuruturuturutuuuuuuuuuuuuu
Suscribo los deseos del autor de la canción. Feliz 2008.Manolito

Anónimo dijo...

¿Qué tal una nueva entrada?
Besos.
Hacefalta.